Me dedicaré a visitar las tumbas de los poetas vivos.
Primero Cementerio General, Santiago de Chile, nicho 44 sin cuerpo de Pablo Neruda. Después Uruguay, fumaré marihuana libre, en silencio y melancolía.
Reiré como un loco junto a Mario Benedetti. Nicaragua y la tumba de
Rubén Darío, que no daría!. Después a París en barco , ahí conversaré
con tantos, de tanto.
Terminaré mi recorrido ebrio, sobre la tumba de Lucila de María del Perpetuo Socorro Godoy Alcayaga en Nueva York.
Como pueden ver, a puros tumbos de tumbas.
El Soto