Monday, February 05, 2007

Levantante y anda!


Hay momentos en la vida donde uno se pierde a si mismo, donde en el fragor de la lucha y la entrega uno va desapareciendo, diluyéndose en el deber ser, entregando tanto que después no eres tú mismo y te pierdes, convirtiendote en un personaje estúpido disponible para agradar a todos, menos a tí.
Ya no hay ruta, ya no hay sueños que cumplir, todo se vuelve una lugubre monotonía, lo peor es que eres conciente de eso y no puedes hacer nada, no tienes las fuerzas de antaño, solamente observas cobardemente y en silencio, esperando que algo pase, que algún milagro ocurra. (Los cobardes esperan milagros, los rebeldes hacen milagros!)
La única forma de salir del círculo del error y la tortura, es volver a creer en tí. Sí, ese ser en que te has transformado no eres tú, tú no eras así!. Tu ibas al desafío, tu te enfrentabas a todos y a todo. Tu creías, eras ferviente en el amor, apasionado en la entrega. Ese ser que ves ahora, cansado, moribundo, silencioso y cobarde no eres tú, es la muerte de tu alma, ¡es la decadencia de tu yo!.
Qué más puede ocurrir?, podrías caer más bajo? Pero te llenas de temores, no eres capaz de dar la cara a la soledad, no eres capaz de enfrentar al gigante que atrapó tu alma, que te redujo a cenizas y escombros.
Escucha la furia, esa rabia que se acumula. Esa rabia acumulada por años, recuerda todas las humillaciones, recuerda como te fuiste secando, como fuiste cediendo y tu yo se fue muriendo, como pensabas que eso era amor, sino era más que un estúpido juego, ¡sino era más que un estúpido infierno!


El esclavo tiene mente de esclavo, el esclavo nunca cree que puede ser libre. Acostumbrado a las migajas, acostumbrado a lo peor, acostumbrado a mendigar.
No hay yo, solo hay silencio y temor.


¡Levantante y anda!

Foto: Galería de Latidos en OFF - Jesús Calaña