
Nunca ha sido fácil para el hombre navegar, incursionar mares desconocidos, enfrentar la soledad del mar, su fuerza y sentirte tan débil frente a su majestuosidad. Tampoco fue fácil descubrir nuevas tierras, encontrar nuevas culturas, asumir el desafío de aprender a convivir con lo distinto y adaptarse a eso. La historia de la humanidad está llena de hombres que han pensado ir más allá, llenos de una ambición extraña pero cautivante que los llevó a embarcarse en locas empresas, donde podían perder o ganar todo. Es increíble pensar como esos seres, embarcados en algunas naves de madera tan insignificantes, solos contra la impetuosidad del mar, navegando solo con esperanzas, luchando contra las corrientes, las tempestades, las rocas fueron capaces de llegar a su destino, un destino que ellos eligieron, un destino que nadie les regalo, ese camino que se hace a pulso y sin permiso.
Lo importante antes de embarcarse es saber donde se quiere llegar, como alguien dijo: "Ningún viento es bueno para quien no sabe adónde va", es importante enfocarse bien en lo que uno quiere, quizás no tanto enfocarse en lo que uno no quiere porque la mayor parte del tiempo uno siempre termina haciendo cosas que no quiere, para alcanzar lo que quiere.
También saber que la oposición será constante y pese a toda la adversidad, tanto interna como externa se debe seguir avanzando, avanzar con porfía y obstinación, con ese temple que sólo la gente que logra cosas sabe tener y que con cada nuevo desafío se fortalece. Se imaginan que a la primera tormenta el aventurero abandone la misión, argumentando que no le gustan los problemas?, o a la tercera tormenta abandone la misión argumentando que no era lo que esperaba, que el quería una playa paradisiaca y no tanta tormenta?.
Sólo el que persevere hasta el final, sólo el que frente a toda la oposición siga avanzando, sólo ese lograra su objetivo.
Les deseo de todo corazón este año puedan lograr todas sus metas.